OJITO A LOS MOVIMIENTOS DE LA FLOTA RUSA POR EL MEDITERRANEO

El grupo marítimo ruso, que navega ahora por el Mediterráneo, incluye un portaaviones que podría ser utilizado en operaciones militares sobre Siria, agravando con ello la guerra y el "sufrimiento"

Europa observa temerosa un movimiento militar de Rusia que puede resultar decisivo en la batalla por Alepo. Un grupo de ocho buques de guerra rusos navegan en estos momentos hacia la parte oriental del Mediterráneo, previsiblemente para reforzar las posiciones que Moscú en Siria. Los barcos atravesaron el viernes. La OTAN advierte de que esta travesía puede culminar en un agravamiento aún mayor de la gravar a guerra en Siria, con bombardeos intensificados sobre Alepo.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, manifestaba este jueves la “preocupación” de la Alianza Atlántica por que el grupo marítimo ruso que incluye un portaaviones y que se dirige al Mediterráneo oriental pueda ser utilizado en operaciones militares sobre Siria que incrementen el “sufrimiento” en Alepo.
“Lo que crea preocupación es que este grupo naval puede ser utilizado para contribuir a las operaciones militares sobre Siria y para incrementar los ataques sobre Alepo”, indicó Stoltenberg en una rueda de prensa tras reunirse con el presidente ucraniano, Petró Poroshenko.
“Y esto es algo muy diferente que desplegar un grupo naval con portaaviones en el Mediterráneo como parte de un despliegue normal que ya hemos visto otras veces”, agregó.
Stoltenberg se refirió así a la escuadra naval rusa encabezada por el portaaviones “Almirante Kuznetsov” que zarpó el pasado día 15 rumbo al mar Mediterráneo.
Además del portaaviones, el único con que cuenta Rusia, en la misión participan su grupo de escolta, integrado por el destructor “Pedro el Grande”, los buques antisubmarinos “Severomorsk” y “Vicealmirante Kulakov”, y varios barcos de aprovisionamiento.
Stoltenberg afirmó que Rusia “tiene por supuesto el derecho a operar en aguas internacionales” y que “no es la primera vez que vemos a este grupo en el Mediterráneo, esto ya ha pasado varias veces antes”.
En cambio, según Stoltenberg, “nos preocupa” que esa agrupación marítima “apoye operaciones militares en Siria de manera que incremente el sufrimiento humano y humanitario”.
El político noruego indicó que las embarcaciones de la OTAN “controlarán normalmente los barcos rusos en su aproximación al Mediterráneo”, de manera “responsable y comedida, como siempre hacen, porque forma parte de la manera en que hacemos un seguimiento de las actividades militares rusas”.
“Así que no está fuera de lo normal ver este despliegue de grupos de portaaviones en el Mediterráneo. Lo que no es normal es que se utilice en una misión de combate, en ataques aéreos contra Alepo”, indicó.
Stoltneberg destacó que “lo que hemos visto es que ha habido muchos ataques contra civiles e infraestructura civil en Alepo”.
“Celebro que haya ahora un alto el fuego temporal, pero eso no es suficiente. Necesitamos un alto el fuego duradero que sea totalmente respetado”, subrayó.
Stoltenberg también recordó que la OTAN y sus miembros respaldan la labor de la coalición que combate al Estado Islámico (EI) en Siria e Irak.
Sobre la operación militar de la coalición para liberar la ciudad iraquí de Mosul, bastión del EI, aseguró que “va a ser difícil porque hay muchos civiles allí”.
“La comunidad internacional debe hacer lo que pueda para intentar reducir en todo lo posible el sufrimiento de los civiles”, afirmó.
Stoltenberg celebró por otra parte la nueva hoja de ruta acordada anoche en Berlín en una cumbre en el llamado “formato de Normandía” (Ucrania, Rusia, Francia y Alemania) sobre la aplicación de los acuerdos de paz de Minsk para el este ucraniano, en manos de separatistas prorrusos.
“La hoja de ruta debe mostrar la responsabilidad de los que no están cumpliendo Minsk”, enfatizó Poroshenko, quien puso como ejemplo que “si se bloquea a los observadores de la OSCE, todo el mundo verá quién es el responsable”, dijo en alusión a Rusia.
Poroshenko se reunió hoy y el miércoles con diferentes líderes de la Unión Europea, que este jueves celebran una cumbre en la que abordarán la relación con Rusia.