Pablo Iglesias y José Julio Rodríguez.
Con un sonoro aplauso. Así recibió el auditorio almeriense al “antimilitarista” José Julio Rodríguez, número uno de Unidos Podemos, durante la presentación de la candidatura de confluencia en la ciudad andaluza.
Menos de una semana después de que Podemos le buscase de nuevo un hueco en las listas, ante el ultimátum del general de abandonar la política en caso de no obtener un puesto en el Congreso, el ex JEMAD se presentó ante sus nuevas bases para hacer una declaración de intenciones.
Las críticas y reticencias iniciales hacia un militar que fue máximo representante de las Fuerzas Armadas durante cuatro años parecieron aplacarse cuando Rodríguez admitió en público ser “un militar democrático y progresista”.
Se definió a sí mismo como “pacifista” y “antimilitarista”, aunque luego precisó que lo es “contra quienes utilizan las Fuerzas Armadas como último recurso”. “Soy tan pacifista y antimilitarista como el que más, y odio la guerra como el que más”.
Sin embargo, tal y como ha comprobado El Chivato, José Julio Rodríguez nunca había sido tan vehemente a la hora de hablar de su “antimilitarismo”. Es más, nada más anunciar su llegada a Podemos, hace apenas seis meses, dejó claro que hay una distancia entre el pacifismo y el antimilitarismo.
¿Qué tiene usted de militar antimilitarista?”, le preguntaron en una entrevista en el diario El Mundo, a lo que el ex JEMAD respondió: “soy un militar pacifista, que, como conoce la guerra, no la quiere. Nada que ver con el antimilitarismo”.
Han pasado seis meses entre estas dos declaraciones.
Menos de una semana después de que Podemos le buscase de nuevo un hueco en las listas, ante el ultimátum del general de abandonar la política en caso de no obtener un puesto en el Congreso, el ex JEMAD se presentó ante sus nuevas bases para hacer una declaración de intenciones.
Las críticas y reticencias iniciales hacia un militar que fue máximo representante de las Fuerzas Armadas durante cuatro años parecieron aplacarse cuando Rodríguez admitió en público ser “un militar democrático y progresista”.
Se definió a sí mismo como “pacifista” y “antimilitarista”, aunque luego precisó que lo es “contra quienes utilizan las Fuerzas Armadas como último recurso”. “Soy tan pacifista y antimilitarista como el que más, y odio la guerra como el que más”.
Sin embargo, tal y como ha comprobado El Chivato, José Julio Rodríguez nunca había sido tan vehemente a la hora de hablar de su “antimilitarismo”. Es más, nada más anunciar su llegada a Podemos, hace apenas seis meses, dejó claro que hay una distancia entre el pacifismo y el antimilitarismo.
¿Qué tiene usted de militar antimilitarista?”, le preguntaron en una entrevista en el diario El Mundo, a lo que el ex JEMAD respondió: “soy un militar pacifista, que, como conoce la guerra, no la quiere. Nada que ver con el antimilitarismo”.
Han pasado seis meses entre estas dos declaraciones.
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