LA AUSENCIA DE ATAQUES 'NO ES SIMPLE CASUALIDAD'
El difícil trabajo policial para detener la ofensiva yihadista contra España
Desde 2015 -año en el que el Ministerio del Interior elevó a 4 el nivel de alerta antiterrorista-, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad han detenido a un total de 163 terroristas yihadistas y han evitado que nuestro país sea víctima de ataques islamistas.
Sandra Toro
Lunes, 21. Noviembre 2016 - 19:28
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La sociedad española no vive ajena a la amenaza terrorista bajo la que se encuentra nuestro país. Un documento escrito en árabe difundido el pasado mes de julio por una de las agencias de noticias oficiales de la organización terrorista, al-Wara’s, alentaba a los “nobles hermanos” a “castigar a los criminales españoles en cualquier lugar [...] con bombas, ametralladoras, atropello con coches, naufragio de barcos, desvío de trenes o aviones o fumigación de veneno en el agua y la comida”. “Levántate, secuéstralos y decapítalos”, exigía el texto a los musulmanes “leales” de países como Marruecos, Túnez, Argelia, Mauritania o Libia. Y es que en lo que va de año Daesh ha amenazado a España hasta en una veintena de ocasiones mediante vídeos, comunicados y entrevistas, al igual que a países como Francia, Bélgica o Reino Unido.
Sin embargo, mientras que desde el 7 de enero de 2015 hasta hoy decenas de ataques islamistas han conmocionado al mundo occidental -casi dos años que han dejado ya más de 300 muertos y cientos de heridos de distinta gravedad-, desde que el Ministerio del Interior elevara a 4 el nivel de alerta antiterrorista, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad españolas han detenido a un total de 163 terroristas yihadistas y han evitado que nuestro país sea víctima de atentados.
La ausencia de ataques 'no es simple casualidad'
Fuentes policiales consultadas por Gaceta.es no niegan la posibilidad de que se perpetre un ataque yihadista en España, pero reconocen que "si no se ha producido no ha sido por simple casualidad", sino "gracias la eficacia de las Fuerzas de Seguridad en la lucha contra el terrorismo". Esto se debe, aseguran, a la experiencia adquirida tras décadas de asesinatos de ETA y tras haber sufrido los ataques islamistas del 11 de marzo de 2004 en Madrid.
Tal y como indican los investigadores del Real Instituto Elcano, Fernando Reinares y Carola García-Calvo, “después del 11-M los responsables policiales optaron por anticipar operaciones antiterroristas para desbaratar posibles atentados en fase de planificación o preparación”. Prueba de ello es la operación llevada a cabo este sábado por la Policía Nacional en Madrid y Roda de Ter (Barcelona), que se ha saldado con la detención de dos marroquíes a los que acusa de ser yihadistas plenamente integrados en el ISIS, dispuestos a atentar en España y muy activos en internet, donde hacían proselitismo.
Inversión en personal y en tecnología
El éxito de esta efectividad también se debe a “la inversión en personal y en tecnología”, así como a la coordinación internacional que existe entre los servicios policiales y de inteligencia para luchar contra este tipo de amenazas. Después del 11-M, relatan las fuentes consultadas, “se reforzó a todos los niveles la Brigada de Información y se especializó en diferentes grupos terroristas… así, existe un grupo específico que se dedica exclusivamente a terrorismo yihadista y que a su vez está dividido en diferentes especialidades: desde redes sociales a materia operativa”.
La gran inversión en tecnología ha facilitado que los servicios de Información dispongan de los mejores medios técnicos para hacer frente al terrorismo islamista. Es el caso del sistema I3, que como avanzó el pasado mes de marzo el exsecretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, permite realizar un seguimiento “más eficaz” a través de las redes sociales contra la amenaza del yihadismo.
Por otro lado, la necesidad de optimizar la lucha, mejorar la gestión de recursos y evitar duplicidades en la Administración llevó al Gobierno a aprobar en 2014 la creación del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO). Su función consiste en “la recepción, integración y análisis de la información estratégica disponible en la lucha contra todo tipo de terrorismo y radicalismo violento, así como el diseño de estrategias específicas contra estas amenazas”.
Los ataques islamistas de Bruselas volvieron a poner de manifiesto la importancia de la coordinación entre países en la lucha contra el terrorismo. La colaboración judicial y policial de España y Marruecos en esta batalla es un ejemplo claro: ha permitido la desarticulación de numerosas células integristas e impedido el reclutamiento de nuevos adeptos para el Daesh.
(Imagen de la operación conjunta hispano-marroquí contra el terrorismo yihadista, que se saldó con cuatro personas detenidas, tres de ellas en Ceuta y la cuarta en Nador, Marruecos, el pasado mes de febrero).
Estos resultados sitúan a las Fuerzas de Seguridad españolas como un referente entre los Cuerpos de Seguridad europeos en la lucha antiterrorista. En el siguiente documento se puede comparar el número de operaciones policiales y detenciones llevadas a cabo en España y en el resto del mundo contra el terrorismo yihadista desde el 11-M.
Además, a través de la iniciativa STOP RADICALISMOS, los ciudadanos pueden colaborar a través de una serie de canales a su disposición para que, de forma confidencial y segura, notifiquen a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad aquellos posibles casos de radicalización en su entorno a través de la página web www.stop-radicalismos.es, la aplicación móvil de alertas de seguridad ciudadana Alertcops y el teléfono gratuito 900 822 066.
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