Mi querido compañero y General, Emilio,
Ante todo me gustaría que comprendieras que cuando callo con lo que decís en ese querido blog es porque suelo estar de acuerdo con vosotros. En el caso de tu comentario sobre el Sr. Trump –desgraciadamente- no es el caso. Nosotros siempre nos hemos dicho las cosas a la cara, mirándonos a los ojos. Permítemelo que lo intente otra vez más.
El Sr, Trump dice “América first”. Tu y yo podríamos decir –de hecho lo decimos- “España lo primero”. No es ese el problema. Desde luego todos quieren a su madre por encima de todo. El problema real es como tratamos a los demás. Bueno, también hay otro problema….. que tenemos madres distintas.
Imagino que si el Sr, Trump quiere que todos sus coches se fabriquen en EEUU tú no tienes, en principio, nada que decir. Pero si la Ford cerrase su factoría de Almussafes en Valencia estoy seguro que te gustaría bastante menos.
El amor a la Patria está bien. El odiar a las patrias de los otros –por ejemplo a Méjico o a la UE- un poco peor. Nacionalismos excluyentes no. Especialmente en la Nación que ha creado las reglas con las que jugamos todos en la esfera internacional.
Veremos como acaba todo esto pero para mí que la corbata del Sr. Trump es demasiado larga. Como su lengua.
Un abrazo
Ángel Tafalla. Almirante (r)
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