La Policía, 'preocupada': El terrorismo islamista podría llegar a España
Juan Ignacio Zoido ha anunciado que las Fuerzas de Seguridad españolas incrementarán sus esfuerzos en la lucha antiterrorista debido a la oleada de ataques que se están produciendo en otros países.
Sandra Toro
Lunes, 12. Diciembre 2016 - 18:39
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Aunque no hay una amenaza concreta contra España, sí existe la posibilidad de que el terrorismo yihadista azote a nuestro país. El Ministerio del Interior, alertado ante las decenas de ataques islamistas que han conmocionado al mundo occidental desde el 7 de enero de 2015 -casi dos años que han dejado ya más de 300 muertos y cientos de heridos de distinta gravedad-, ha decidido incrementar los esfuerzos en la lucha antiterrorista. Así lo ha anunciado el titular del Departamento, Juan Ignacio Zoido, que ha recordado que se mantendrá el actual nivel 4 de alerta.
Zoido ha aprovechado su presencia en el acto de presentación del calendario solidario de la Guardia Civil y la Fundación Juegaterapia para reivindicar la "profesionalidad extrema" de las Fuerzas de Seguridad españolas en la lucha contra el terrorismo yihadista. "Gracias a la Policía y a la Guardia Civil se está detectando cualquier movimiento sospechoso y se está deteniendo a presuntos yihadistas", ha recordado el ministro del Interior, a la vez que ha rechazado la posibilidad de aumentar el nivel de alerta.
"No cabe la menor duda de que aunque no haya una amenaza concreta, es cierto que se están produciendo atentados a nivel internacional", ha alertado Zoido, que ha mostrado su preocupación ante la posibilidad de que "esos movimientos puedan llegar a España". Por ello las Fuerzas de Seguridad -caracterizadas por su trabajo preventivo para "ir por delante, con un celo y profesionalidad digna de destacar"- incrementarán sus esfuerzos.
Cabe recordar que un documento escrito en árabe difundido el pasado mes de julio por una de las agencias de noticias oficiales del grupo terrorista Estado Islámico, al-Wara’s, alentaba a los “nobles hermanos” a “castigar a los criminales españoles en cualquier lugar [...] con bombas, ametralladoras, atropello con coches, naufragio de barcos, desvío de trenes o aviones o fumigación de veneno en el agua y la comida”. “Levántate, secuéstralos y decapítalos”, exigía el texto a los musulmanes “leales” de países como Marruecos, Túnez, Argelia, Mauritania o Libia. Y es que en lo que va de año el Estado Islámico ha amenazado a España hasta en una veintena de ocasiones mediante vídeos, comunicados y entrevistas, al igual que a países como Francia, Bélgica o Reino Unido.
Zoido ha aprovechado su presencia en el acto de presentación del calendario solidario de la Guardia Civil y la Fundación Juegaterapia para reivindicar la "profesionalidad extrema" de las Fuerzas de Seguridad españolas en la lucha contra el terrorismo yihadista. "Gracias a la Policía y a la Guardia Civil se está detectando cualquier movimiento sospechoso y se está deteniendo a presuntos yihadistas", ha recordado el ministro del Interior, a la vez que ha rechazado la posibilidad de aumentar el nivel de alerta.
"No cabe la menor duda de que aunque no haya una amenaza concreta, es cierto que se están produciendo atentados a nivel internacional", ha alertado Zoido, que ha mostrado su preocupación ante la posibilidad de que "esos movimientos puedan llegar a España". Por ello las Fuerzas de Seguridad -caracterizadas por su trabajo preventivo para "ir por delante, con un celo y profesionalidad digna de destacar"- incrementarán sus esfuerzos.
Cabe recordar que un documento escrito en árabe difundido el pasado mes de julio por una de las agencias de noticias oficiales del grupo terrorista Estado Islámico, al-Wara’s, alentaba a los “nobles hermanos” a “castigar a los criminales españoles en cualquier lugar [...] con bombas, ametralladoras, atropello con coches, naufragio de barcos, desvío de trenes o aviones o fumigación de veneno en el agua y la comida”. “Levántate, secuéstralos y decapítalos”, exigía el texto a los musulmanes “leales” de países como Marruecos, Túnez, Argelia, Mauritania o Libia. Y es que en lo que va de año el Estado Islámico ha amenazado a España hasta en una veintena de ocasiones mediante vídeos, comunicados y entrevistas, al igual que a países como Francia, Bélgica o Reino Unido.
Inversión en personal y en tecnología
El éxito de la efectividad de las Fuerzas de Seguridad españolas se debe a “la inversión en personal y en tecnología”, así como a la coordinación internacional que existe entre los servicios policiales y de inteligencia para luchar contra este tipo de amenazas. Después de los ataques islamistas del 11 de marzo de 2004 en Madrid, relataron recientemente fuentes policiales consultadas por La Gaceta, “se reforzó a todos los niveles la Brigada de Información y se especializó en diferentes grupos terroristas… así, existe un grupo específico que se dedica exclusivamente a terrorismo yihadista y que a su vez está dividido en diferentes especialidades: desde redes sociales a materia operativa”.
La gran inversión en tecnología ha facilitado que los servicios de Información dispongan de los mejores medios técnicos para hacer frente al terrorismo islamista. Es el caso del sistema I3, que como avanzó el pasado mes de marzo el exsecretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, permite realizar un seguimiento “más eficaz” a través de las redes sociales contra la amenaza del yihadismo.
Por otro lado, la necesidad de optimizar la lucha, mejorar la gestión de recursos y evitar duplicidades en la Administración llevó al Gobierno a aprobar en 2014 la creación del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO). Su función consiste en “la recepción, integración y análisis de la información estratégica disponible en la lucha contra todo tipo de terrorismo y radicalismo violento, así como el diseño de estrategias específicas contra estas amenazas”.
Los ataques islamistas de Bruselas volvieron a poner de manifiesto la importancia de la coordinación entre países en la lucha contra el terrorismo. La colaboración judicial y policial de España y Marruecos en esta batalla es un ejemplo claro: ha permitido la desarticulación de numerosas células integristas e impedido el reclutamiento de nuevos adeptos para el ISIS
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